Y tú, ¿dónde acostumbras a tirar el papel higiénico, en el inodoro o en el bote de basura?

Muchas veces, la respuesta a esta pregunta obedece más a la costumbre que a un tema de salubridad, sin embargo, una de estas opciones es más recomendable; te decimos cuál es y por qué.

Comencemos hablando de la acción de arrojar el papel higiénico al bote de basura, que tras ser desechados son guardados en bolsas y trasladados a basureros, donde quedan expuestos al ambiente.

Esta acción provoca que la materia fecal quede expuesta al medio ambiente, se deshidrate y tras convertirse en polvo sea esparcida por el viento. De esta forma algunos microorganismos que habitan el sistema digestivo, como los cisticercos y la salmonela, pueden diseminarse (a veces con la ayuda de insectos como las moscas) y causar infecciones.

Esta práctica comenzó cuando sólo existían las fosas sépticas y la costumbre permaneció a pesar de que con el tiempo se implementó una red de drenaje.

Aunque en los últimos años los fabricantes de papel de baño han usado materiales que se desintegran en un inodoro de manera mas sencilla, muchas personas siguen tirándolos en botes de basura por el temor de perjudicar al drenaje.

En resumen, lo más aconsejable es tirar los papeles de baño al WC. Lo mismo ocurre con el excremento de las mascotas y los bebés (aunque antes se debe separar del pañal, que debe ir en el bote de basura).