Columna Sur  

Héctor Narváez  

Lo que sucedió el martes con el triple feminicidio en esta ciudad, la segunda más importante de Chiapas, ya es muy grave.

Mientras, a la actual alcaldesa sustituta y a la vez electa en las elecciones pasadas, Rosy Urbina, parece poco importarle lo que acontece.

La irresponsabilidad en Tapachula. Y se puede poner peor, si las autoridades superiores no hacen algo al respecto. 

En retroceso 

Si bien es cierto que la autoridad no puede andar protegiendo a cada uno de los ciudadanos, pero también es una realidad que no han combatido la inseguridad en esta ciudad.

Ayer, por ejemplo, la “glamurosa señora” llegó tranquilamente al Ayuntamiento, como si nada pasara, aunque un día antes una persona entró a un domicilio particularmente y se supone mató con una pistola a tres mujeres, entre ellas una menor de edad.

Y como para justificarse de que está haciendo un buen trabajo, cortó el listón de una muestra fotográfica de las obras que realizó, como si no hubiera cosas más importantes que atender.

Lo peor, vino después. Porque en lugar de condenar los hechos y hacer un pronunciamiento en contra del triple feminicidio, permitió que le celebraran su onomástico.

En medio de una tragedia que enluta a esta ciudad, al interior del Ayuntamiento se ofreció un desayuno bufet y un pastel, a nombre de la dama.

Y la fiesta continuó, aseguran, con los más cercanos en un importante restaurante de la ciudad.

Así, esta doña se encuentra muy empoderada, para beneficio de su género. Pero, con un poder que lamentablemente no lo utiliza para ayudar en algo a las mujeres tapachultecas.

Por el contrario, sigue demostrando su indiferencia a los principales problemas de Tapachula, como es la inseguridad, que galopa impunemente.

Un tema que no ha logrado resolver durante su mandato como alcaldesa sustituta. Y que dudo que pueda atenderlo en los tres años que tendrán como futura autoridad municipal.

En verdad que, en lugar de ir avanzando esta ciudad, se encuentra en retroceso. Que, en vez de contar con autoridades responsables, tiene a malos funcionarios que solo les gusta andar festejando. Y “a costillas del pueblo”. 

Vela en el entierro 

Lo que sucede en Tapachula con la inseguridad, desde hace tiempo se previó.

Nada más, que las autoridades superiores de Chiapas no creyeron. Hasta que vieron el martes con lo del triple feminicidio, que es una lamentable realidad.

Y vuelvo a insistir en este espacio: a la hoy alcaldesa sustituta, le han dejado muy suelta. Tanto que ha hecho lo que ha querido, sin rendirle cuentas a nadie y sin importarle nada.

Ayer, la Secretaría de la Igualdad de Género en el estado condenó los hechos y pidió que se haga justicia. La Fiscalía de Justicia informó que inició la investigación. Es un mensaje muy claro de las autoridades en la entidad.

Nada más que las cosas no deben de quedar ahí. Es urgente que refuercen la seguridad en esta ciudad, para evitar que se repita otro caso de este tipo.

Y no solo con la presencia de las corporaciones policiacas de los tres niveles, que eso debe de ser el principio. Necesitan llegar al fondo, a la raíz del problema en Tapachula.

Desde tiempo atrás se sabe que, en la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, se manejan mal las cosas. Aparte de que todos en esta dependencia son generales, hay muchos actos de corrupción que siguen sin recibir las sanciones correspondientes.

Mientras los mandos “se reparten el pastel” del presupuesto, como el pago del salario, gastos de gasolina y en la alimentación, a los elementos los traen muy castigados.

Hace meses me llegó un reporte de que, en esta corporación, ni siquiera para el combustible les daban. Que, en ocasiones, los policías han tenido que cooperar de su salario, para cargar el tanque.

Lo mismo sucede con las unidades descompuestas, en donde tienen que “hacer la vaquita” para sacar las patrullas de los talleres mecánicos y así puedan hacer su trabajo.

¿Y el presupuesto? ¿Para qué se ocupa? ¿En manos de quien queda esos millonarios recursos?

Aparte de eso, a los elementos no los dotan del equipamiento necesario, como sucedió con aquellas bicicletas que no estaban en buenas condiciones y se reportaron en tesorería a sobreprecio. 

Y después asegura Doña Rosy Urbina que no tiene responsabilidad de los asaltos y de los muertos por la delincuencia, cuando si ha tenido “vela en este entierro”. 

 

Insisto: ojalá que las autoridades superiores de Chiapas hagan algo con la inseguridad de Tapachula. Porque esta situación puede llegar a sobrepasar los límites. 

Moraleja: Sobre advertencia… ¡No hay engaño! 

Al margen: ¡Como gato boca arriba! 

Ricardo Monreal, dijo en entrevista a Radiofórmula, que el Presidente AMLO no lo mencionó, por respeto al Poder Legislativo. 

Pero, al comentarle el periodista Leonardo Curzio que si sacó el nombre de Claudia Sheinbaum, respondió que se debe a que trabaja con ella de manera cercana. No le quedó de otra que defenderse como gato boca arriba. ¡A ver si sigue así el líder de Morena en el Senado o se rebela! 

Por último: ¿Cumplirán con el abasto? 

Ayer se anunció que dentro de tres meses se creará la empresa “Gas Bienestar”, para ofrecer cilindros a bajo precio y con ello combatir los altos costos. 

Para empezar, hay que esperar si en ese plazo se cuenta con esta opción que ofrece el Gobierno Federal. Y después, ver si pueden con la oferta de la demanda de los consumidores. ¿Cumplirán con el abasto? ¡No vaya a suceder lo mismo con los medicamentos para los niños con cáncer! 

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